[1/1] Sospechas
Mar. 26th, 2010 03:20 pm![[personal profile]](https://www.dreamwidth.org/img/silk/identity/user.png){kind=small}
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rin_no_neFandom: Tennis no Oujisama.
Personajes: Tachibana Kippei, Tachibana An/Ryuuzaki Sakuno.
Resumen: Kippei quería confirmar si su hermana estaba saliendo con ella o no.
No era la primera, ni la segunda, ni la tercera vez.
En realidad, Kippei no había intentado llevar una cuenta en ningún momento, pero ya habían sido tantas las veces que se atrevía a asegurar que la compañía de su hermana se había vuelto invariable.
Sorprendentemente no era Kamio ni Momoshiro, aunque si se trataba de alguien de Seigaku, según su uniforme, mas no se trataba de un muchacho.
Decir que la chica de trenzas era una amiga de An sería lo lógico y era lo que Kippei había pensado originalmente, pero el constante buen humor de su hermana, sus frecuentes salidas y el verlas demasiado cerca en un par de ocasiones le habían hecho dudar.
Claro que sólo había una forma de confirmarlo.
Kippei movió su pie impacientemente hasta que al fin pudo pasar la calle y sin perder de vista a An y su acompañante, quienes estaban sentadas en las mesas exteriores de un pequeño café, se quitó la gorra y las gafas oscuras que había conseguido prestadas para poder asegurarse, sin que ellas notasen su presencia, de que no se estaban encontrando con alguien más luego de reunirse.
Las citas en grupos eran comunes, al fin de cuentas, pero luego de media hora de verlas charlar animadamente sin siquiera fijarse en su alrededor o pedir algo más luego de terminar las bebidas que habían pedido al llegar, estaba seguro que no era así, por lo que sólo le quedaba hacer una última cosa para corroborarlo.
—An —dijo, acercándose a la mesa en la que estaban e intentando verse tan sorprendido como podía—, no sabía que estarías aquí.
La niña de trenzas se sonrojó inmediatamente, pero a pesar de eso saludó en voz baja y se inclinó levemente casi de inmediato. An, en cambio, frunció el ceño.
—¿No estarás siguiéndome? —reclamó al tiempo que cruzaba sus brazos.
—Claro que no.
—¿Seguro?
Que su hermana no dejase sus sospechas e incluso dudase de la excusa que Kippei le dio cuando le preguntó que estaba haciendo allí era la clara señal de que no quería ningún tipo de interrupción, especialmente de su hermano, y si ese era el caso sólo podían estar en una cita.
—A-An —interrumpió la chica luego de varios minutos de preguntas, respuestas y miradas desconfiadas de An, consiguiendo que los dos hermanos girasen para verla, cosa que causó que sus mejillas se coloreasen nuevamente—. La película comienza en diez minutos...
—Tienes razón, Sakuno. —An se levantó rápidamente, colgando su bolso en su hombro—. No te atrevas a seguirnos —advirtió, antes de tomar la mano de Sakuno, quien se despidió con un movimiento de cabeza algo apresurado y siguió la guía de An sin un sólo segundo de duda.
Sakuno. Kippei sonrió y se despidió con un movimiento de mano y un "Diviértanse. Y si te vas a demorar avísame" que consiguió que la chica le respondiese la sonrisa tímidamente, aun cuando An solamente giró sus ojos y no pronunció ninguna palabra.
Cuando regresase a casa le diría que la invitase a cenar, decidió Kippei.
Porque ahora sí se atrevía a afirmar que no eran simplemente amigas y si su hermana ya se había decidido por alguien daba igual que fuese por un hombre o una mujer, lo que importaba era que la persona en cuestión la mereciese y él se encargaría de averiguarlo.
Personajes: Tachibana Kippei, Tachibana An/Ryuuzaki Sakuno.
Resumen: Kippei quería confirmar si su hermana estaba saliendo con ella o no.
No era la primera, ni la segunda, ni la tercera vez.
En realidad, Kippei no había intentado llevar una cuenta en ningún momento, pero ya habían sido tantas las veces que se atrevía a asegurar que la compañía de su hermana se había vuelto invariable.
Sorprendentemente no era Kamio ni Momoshiro, aunque si se trataba de alguien de Seigaku, según su uniforme, mas no se trataba de un muchacho.
Decir que la chica de trenzas era una amiga de An sería lo lógico y era lo que Kippei había pensado originalmente, pero el constante buen humor de su hermana, sus frecuentes salidas y el verlas demasiado cerca en un par de ocasiones le habían hecho dudar.
Claro que sólo había una forma de confirmarlo.
Kippei movió su pie impacientemente hasta que al fin pudo pasar la calle y sin perder de vista a An y su acompañante, quienes estaban sentadas en las mesas exteriores de un pequeño café, se quitó la gorra y las gafas oscuras que había conseguido prestadas para poder asegurarse, sin que ellas notasen su presencia, de que no se estaban encontrando con alguien más luego de reunirse.
Las citas en grupos eran comunes, al fin de cuentas, pero luego de media hora de verlas charlar animadamente sin siquiera fijarse en su alrededor o pedir algo más luego de terminar las bebidas que habían pedido al llegar, estaba seguro que no era así, por lo que sólo le quedaba hacer una última cosa para corroborarlo.
—An —dijo, acercándose a la mesa en la que estaban e intentando verse tan sorprendido como podía—, no sabía que estarías aquí.
La niña de trenzas se sonrojó inmediatamente, pero a pesar de eso saludó en voz baja y se inclinó levemente casi de inmediato. An, en cambio, frunció el ceño.
—¿No estarás siguiéndome? —reclamó al tiempo que cruzaba sus brazos.
—Claro que no.
—¿Seguro?
Que su hermana no dejase sus sospechas e incluso dudase de la excusa que Kippei le dio cuando le preguntó que estaba haciendo allí era la clara señal de que no quería ningún tipo de interrupción, especialmente de su hermano, y si ese era el caso sólo podían estar en una cita.
—A-An —interrumpió la chica luego de varios minutos de preguntas, respuestas y miradas desconfiadas de An, consiguiendo que los dos hermanos girasen para verla, cosa que causó que sus mejillas se coloreasen nuevamente—. La película comienza en diez minutos...
—Tienes razón, Sakuno. —An se levantó rápidamente, colgando su bolso en su hombro—. No te atrevas a seguirnos —advirtió, antes de tomar la mano de Sakuno, quien se despidió con un movimiento de cabeza algo apresurado y siguió la guía de An sin un sólo segundo de duda.
Sakuno. Kippei sonrió y se despidió con un movimiento de mano y un "Diviértanse. Y si te vas a demorar avísame" que consiguió que la chica le respondiese la sonrisa tímidamente, aun cuando An solamente giró sus ojos y no pronunció ninguna palabra.
Cuando regresase a casa le diría que la invitase a cenar, decidió Kippei.
Porque ahora sí se atrevía a afirmar que no eran simplemente amigas y si su hermana ya se había decidido por alguien daba igual que fuese por un hombre o una mujer, lo que importaba era que la persona en cuestión la mereciese y él se encargaría de averiguarlo.
26/03/2010
